La gestión de activos es una de las piezas fundamentales de los procesos de mantenimiento en las empresas. En ella conviven dos líneas de actuación que son claves para mantener la productividad, reducir el riesgo de fallos y, en consecuencia, maximizar la disponibilidad de los recursos.

Por un lado, se requiere una completa monitorización de las infraestructuras para maximizar su eficacia y eficiencia. Por otro, la integración de nuevas tecnologías y de procesos de transformación digital es esencial para implantar nuevas formas de monitorización y gestión de los activos.

Ambas líneas han de converger para proporcionar una visión completa y holística del conjunto de recursos en producción.

Por otro lado, para hacer realidad una gestión de activos eficiente es necesaria la implementación de sistemas como los EAM (Enterprise Asset Management) o los APM (Asset Performance Management). En el primer caso, son sistemas que se encargan de recoger, integrar, visualizar y analizar datos de los activos con objeto de minimizar riesgos y generar eficiencias. Los EAM permiten, además, monitorizar el estado de los activos. Por su parte, los sistemas APM (Asset Performance Management) van un paso más allá y gracias a la integración de diferentes tecnologías permiten mejorar la fiabilidad y disponibilidad de los activos.

Tanto los Enterprise Asset Management como los Asset Performance Management facilitan la puesta en marcha de las estrategias de mantenimiento. Estas estrategias se clasifican en cinco tipos:

SAGA es una solución basada en el sistema Asset Performance Management. Es una solución única desarrollada por expertos de REE y que ahora se evoluciona junto al TSO belga, Elia. SAGa permite transformar la manera en la que las empresas de servicios públicos gestionan sus activos a través de cuatro pilares fundamentales: un amplio proceso de adquisición y digitalización del conocimiento, una excelente política de gobierno de los datos, el uso de herramientas inteligentes para la toma de decisiones y la visión completa de todo el sistema más allá del estado individual de todos los activos que lo componen.

La visión holística de SAGA permite analizar el estado de los activos de forma individual, agrupada e incluso globalmente, identificando el impacto de su estado a diferentes niveles hasta llegar a una visión completa del parque de activos. El conocimiento, las mejores prácticas, la tecnología de vanguardia y la amplia experiencia de REE y ELIA permiten que SAGA se convierta no sólo en una herramienta indispensable para la gestión de los activos eléctricos sino también en un acelerador de los procesos de transformación digital necesarios para impulsar el crecimiento y la competitividad de las empresas en un contexto altamente cambiante.