La gestión de infraestructuras críticas, como redes eléctricas, es fundamental para el funcionamiento de nuestras sociedades modernas, pero estas infraestructuras son cada vez más complejas y están sujetas a una gran cantidad de estrés, tanto de origen natural como humano. Como consecuencia, para garantizar su fiabilidad, eficiencia y seguridad, es necesario adoptar nuevas tecnologías y enfoques innovadores.
El aislamiento eléctrico más extendido de la Red de Transporte es el aire, pero para poder tener los conductores al aire es necesario sujetarlos con diferentes tipos de aisladores. Estos dispositivos impiden el flujo de corriente eléctrica entre dos puntos, previniendo cortocircuitos y asegurando la protección en las instalaciones eléctricas.
La gestión de infraestructuras críticas, como la red eléctrica, se enfrenta a desafíos cada vez más complejos y la inteligencia artificial (IA) podría ser la clave para transformar la eficiencia y competitividad del sector. En este sentido, la IA ha emergido en los últimos años como una tecnología disruptiva con el potencial de revolucionar la forma en la que gestionamos estas infraestructuras.
El Edge Computing es un paradigma de computación distribuida que se basa en la descentralización del procesamiento de datos. Sin embargo, plantea una aproximación diferente a la computación en paralelo tradicional, ya que en lugar de enviar toda la información a servidores centrales o a la nube para ser procesada, el Edge Computing permite que los datos se procesen más cerca de la fuente, es decir, en el "borde" de la red. Este enfoque ofrece múltiples beneficios como:
Elewit, como plataforma tecnológica de Redeia, quiere dar un paso más en Vigilancia Tecnológica para aprovechar al máximo las nuevas tecnologías con potencial para impulsar la transición energética y la conectividad.